MODELO DE INVESTIGACIÓN

Premisa 2. La experiencia óptima (autotélica)

Durante doce años, un equipo de investigación liderado por Mihaly Csikszentmihalyi (Csikszentmihalyi, 1974; ver resumen en Csikszentmihalyi et al., 2014) y distribuido por todo el mundo realizó miles de entrevistas, y fomularon cuestionarios utilizando el Método de Muestreo de Experiencia (MDE). Esta metodología consiste en realizar medidas repetidas de la experiencia de los sujetos en su entorno natural. En el estudio realizado por Csikszentmihalyi & Larson (1984), se tomaron múltiples medidas en las que se les pedía a los sujetos que informaran y describiesen lo que hacían en ese momento y cómo se sentían (afecto: feliz, alegre, sociable y amigable; activación: alerta, activo, fuerte y emocionado; eficiencia cognitiva: concentración, facilidad de concentración, despreocupación y claridad; motivación: desea realizar esta actividad, control de acciones, libre e implicado). Se trataba de un estudio de carácter psicológico para comprender el fenómeno de la felicidad, indagando sobre las actividades que producían el disfrute y la forma en que se sentían las personas cuando disfrutaban de ellas. Entre las conclusiones, se estableció que una “experiencia óptima, es aquella en la que las personas están tan involucradas en una actividad que su realización es intrínsecamente gratificante y nada más parece importarles, puede ser, entonces, un estado del ser humano que responde a unas características universales (Csikszentmihalyi et al., 2014). Las características que definieron estas experiencias se especifican a continuación, a modo de resumen de su obra Fluir (flow): una psicología de la felicidad (Csikszentmihalyi, 1997).

Equilibrio entre el desafío de la tarea y las habilidades. De forma resumida, diremos que según Csikszentmihalyi, la experiencia de flujo requiere un equilibrio óptimo entre los desafíos percibidos y las habilidades del sujeto. Cuando no existe ese equilibrio, se pueden dar dos situaciones diferentes: (a) si la dificultad de la tarea supera las competencias individuales se puede generar un estado de ansiedad por exceso de dificultad que haga que abandone, mientras que si, por el contrario, las habilidades superan demasiado la dificultad de la tarea, el individuo podrá aburrirse y, en consecuencia, poco motivado.

La concentración y enfoque. En palabras de Csikszentmihalyi (1997), cuando la atención está completamente absorta en una actividad, lo que la persona está haciendo llega a ser algo espontáneo, casi automático, y el protagonista deja de ser consciente de sí mismo como un ser separado de lo que hace. Por eso muchos describen la experiencia como un estado de flujo, en el que la mente discurre libre y armónicamente. En la medida en que la atención está completamente dirigida a la acción que se realiza, la persona alcanza un altísimo grado de concentración en un campo muy limitado y concreto de atención.

Las metas claras. Aunque el tiempo que duran las distintas actividades placenteras es muy variable, y mientras que unas culminan en pocos segundos otras pueden alargarse días enteros, en todas ellas la persona es consciente de las metas o propósitos finales. Pero según lo detectado en sus estudios (Csikszentmihalyi, 1992), las actividades que llevan en su propia esencia el libre espacio de la improvisación, sólo llegan a disfrutarse cuando sus protagonistas son capaces de ir construyendo las reglas y las metas sobre la marcha.

La retroalimentación. No es tan importante el tipo de retroalimentación que se reciba como poder tener la sensación de que la tarea o actividad se está haciendo bien.

Concentración máxima en lo que se está haciendo. En los momentos de flujo la atención excluye toda la información que ocupa la cabeza y que no es de utilidad para lo que se está realizando. En palabras Csikszentmihalyi (1997), las preocupaciones de la vida ordinaria quedan excluidas de la mente. Es como si la persona, mientras se mantiene la actividad, desconectara su memoria y alejara la entropía poniendo orden en su mente y olvidando los aspectos desagradables de la vida.

Control personal sobre la situación o actividad. Toda experiencia de flujo involucra la sensación de tener el control o la falta de preocupación por perderlo.

Pérdida del sentimiento de autoconciencia. Cuando se experimenta la sensación de flujo, desaparece de la conciencia algo a lo que comúnmente dedicamos mucha atención: la propia personalidad. Este fenómeno, adicionalmente, suele venir aparejado a una sensación de fusión con el entorno que, según el caso, puede estar configurado por la montaña, el mar, el colectivo de personas con el que se realiza la actividad o cualquier otro componente del cosmos.

Distorsión del sentido del tiempo. La dimensión objetiva del mundo externo se vuelve irrelevante, y la percepción subjetiva de la experiencia temporal se ve alterada.

Referencias

Csikszentmihalyi, M. (1974). Flow: Studies of enjoyment. University of Chicago.

Csikszentmihalyi, M. (1997). Fluir (flow): una psicología de la felicidad. Editorial Kairós.

Csikszentmihalyi, M., & Csikszentmihalyi, I. S. (Eds.). (1992). Optimal experience: Psychological studies of flow in consciousness. Cambridge university press.

Csikszentmihalyi, M., Csikszentmihalyi, M., Abuhamdeh, S., & Nakamura, J. (2014). Flow. Flow and the foundations of positive psychology: The collected works of Mihaly Csikszentmihalyi, 227-238.