MODELO DE INVESTIGACIÓN
Premisa 3. Hacia un modelo de enseñanza-aprendizaje óptimo
Ambiente de aprendizaje óptimo
La investigación sobre el flujo y la calidad de la experiencia en entornos de aprendizaje ha buscado capturar y explicar los factores del ambiente aprendizaje que facilitan las experiencias óptimas (Shernoff, Abdi, Anderson y Csikszentmihalyi, 2014; Shernoff et al., 2016). Con base en investigaciones previas de Csikszentmihalyi y Schneider (2000), Shernoff (2013) formuló el modelo conceptual de complejidad ambiental, argumentando que los contextos de aprendizaje óptimos que promueven la participación de los estudiantes pueden caracterizarse por la combinación de desafío ambiental y apoyo ambiental. En consonancia con el MASDM, la complejidad ambiental es un constructo que implica la presencia simultánea de desafío ambiental y apoyo ambiental (Shernoff et al., 2016). El desafío ambiental tiene como objetivo guiar la acción o el pensamiento del estudiante, y el apoyo ambiental les ayuda a lograr los desafíos ambientales (Csikszentmihalyi et al., 1993). El apoyo ambiental se refiere a los recursos instrumentales, sociales y emocionales puestos a disposición para ayudar a los estudiantes a enfrentar los desafíos ambientales (Reeve & Jang, 2006). En otras palabras, la participación es mayor en las aulas (a) donde se ofrecen tareas desafiantes, variables, significativas e interesantes (b) con maestros que apoyan la autonomía de los estudiantes; y (c) proyectan altas expectativas en el alumnado y proporcionar comentarios claros y consistentes a los estudiantes (Jang, et al., 2016; Skinner et al., 2008).
Referencias
Csikszentmihalyi, M. (1993). Activity and happiness: Towards a science of occupation. Journal of Occupational Science, 1(1), 38-42.
Csikszentmihalyi, M. & Schneider, B. (2000): Becoming Adults, New York: Basic.
Jang, H., Kim, E. J., & Reeve, J. (2016). Why students become more engaged or more disengaged during the semester: A self-determination theory dual-process model. Learning and instruction, 43, 27-38.
Reeve, J., & Jang, H. (2006). What teachers say and do to support students’ autonomy during a learning activity. Journal of educational psychology, 98(1), 209.
Shernoff, D. J., Abdi, B., Anderson, B., & Csikszentmihalyi, M. (2014). Flow in schools revisited: Cultivating engaged learners and optimal learning environments. In Handbook of positive psychology in schools (pp. 211-226). Routledge.
Shernoff, D. J. (2013). Optimal Learning Environments to Promote Student Engagement. Advancing Responsible Adolescent Development. https://doi.org/10.1007/978-1-4614-7089-2
Shernoff, D. J., Kelly, S., Tonks, S. M., Anderson, B., Cavanagh, R. F., Sinha, S., & Abdi, B. (2016). Student engagement as a function of environmental complexity in high school classrooms. Learning and Instruction, 43, 52–60. https://doi.org/10.1016/j.learninstruc.2015.12.003
Skinner, E., Furrer, C., Marchand, G., & Kindermann, T. (2008). Engagement and disaffection in the classroom: Part of a larger motivational dynamic? Journal of educational psychology, 100(4), 765.

